Hay muchos países del mundo que se encuentran en situación de subdesarrollo, lo que los deja en situación de extrema vulnerabilidad y desprotección ante cualquier enfermedad.

Los países de África Occidental son un blanco fácil a la propagación de un virus, principalmente en casos de epidemias y aún más en situación de pandemia.

El nuevo coronavirus, el nCoV19, está hoy en día valorado por la Organización Mundial de Salud de riesgo muy alto de contagio. No obstante, todavía no fue declarado el “estado de pandemia”, a pesar de que a priori cumple con la definición estipulada por la misma OMS: “Se llama pandemia a la propagación mundial de una nueva enfermedad”.

Actualmente ya existen algunos casos de esta nueva cepa de coronavirus registrados en la parte más pobre de África, África Negra (concretamente en el área oriental), de acuerdo con datos del Gobierno de Hong Kong: 4 casos positivos en Senegal, 2 en Nigeria y 1 en Togo.

También se identificaron 55 casos en Egipto y 3 en África del Sur.

Los países de América del Sur en vías de desarrollo como Brasil alcanzan los 25 infectados, Ecuador 15, Paraguay 1 y Colombia 1.  También India registra 43 casos que, aunque sea un país de grandes expectativas de desarrollo geoestratégico, no deja de ser uno de los más pobres del mundo.

 

Gráfico desarrollo nCOV19 Desarrollo nCOV19

COV19 OMS

 

Hay varios factores que pueden entorpecer la capacidad de un gobierno para hacer frente a una epidemia o pandemia. Por ejemplo, fenómenos de naturaleza, como los ciclones tropicales en países como Mozambique o Zimbabue. O también los provocados por el hombre, como ocurre con la contaminación.

Con relación a la calidad y eficacia de los sistemas sanitarios de cada país, en un ranking de 93 países (fuente: https://www.numbeo.com/, 2020 ), Egipto, Marruecos, Azerbaiyán, Bangladesh, Iraq y Venezuela son considerados los peores sistemas del mundo contrastando con Taiwán, Corea del Sur, Japón, Dinamarca, Francia y España, respectivamente.

Uno de los mayores problemas de los países de tercer mundo es la casi ausencia de protocolos preventivos en la sanidad, lo que lleva a que la población esté desinformada y sólo acuda al hospital cuando se encuentran demasiado mal.

A lo largo de la historia hubo varias epidemias y pandemias que devastaron la población. Destacamos el caso de la pandemia de gripe, causada por un brote de influenza A, subtipo H1N1, virus que mató a más de 50 millones de personas a nivel mundial y fue el caso más grave de pandemia desde que hay conocimiento.

Hay varias teorías de expertos en este ámbito sobre dónde se habrá desencadenado el foco inicial del brote. Unos creen que fue en la base militar de Fort Riyel en Estados Unidos (1918), otros piensan que fue en China (1917) y también se comenta que podía haber sido en Francia (1916).

No obstante, hasta hoy sigue sin saberse su origen y a cuánta gente mató realmente.

Debido a que España era el único país que después de la I Guerra Mundial no censuró las publicaciones que había sobre este tipo de gripe y cómo afectaba a sus ciudadanos, en todo el mundo se conocía esta enfermedad como la Gripe Española; en España, según estudios publicados en 2008 de un médico epidemiólogo del Hospital Clínic, Antoni Trilla, habría matado a más de 260.000 personas.

 

EL ÉBOLA

Aparece en Sudán y República Democrática del Congo en 1976.

Es una de las enfermedades más mortales para el hombre. Tiene mayor incidencia en el ecuador africano y sus brotes fueron mejor controlados hasta 2014, cuando empezó a propagarse por las ciudades principales de África Occidental, sobrepasando las 11.000 muertes en 2015 en tres países: Liberia, Guinea y Sierra Leona.

Desde esta fecha se registraron hasta treinta brotes/epidemias distintas, con una mortalidad superior al 90%, principalmente en África.

El barrio más pobre de toda África Occidental es el West Point, que se ubica en Monrovia, en Liberia; el hecho de que esta zona no tuviera agua corriente hizo que el ébola atacara con mucha fuerza.

En Guinea, Liberia y Sierra Leona había un único médico para cada 10.000 habitantes.

Un brote de ébola suele tardar de 2-5 meses, sin embargo, este último tardó mucho más, prácticamente dos años.

Más de 8% de sanitarios fueron infectados.

La propagación ocurrió por un pasajero de un vuelo procedente de Lagos (Nigeria), y el epicentro del brote fue en Guinea en 2014.

 

EL ORIGEN vs SEMEJANZAS ENTRE VIRUS

Todas estas enfermedades víricas son de difícil investigación con tanto de poder saber su origen. De igual modo que con el nCoV19, también se cree que el reservorio del murciélago fue el foco del ébola. Aunque en esta enfermedad para que se diera la transmisión, tendría que haber una manipulación previa de cadáveres, mientras que la teoría más apoyada sobre el nuevo coronavirus es que pasó del reservorio del murciélago al ciervo y de este al hombre.

También hay otras enfermedades como la malaria, que infectó a más del 50% de la población en Burundi (5 millones y medio de personas), el cólera se propagó a 15 países o el Marburgvirus (surge en Alemania en 1967) y reaparece en Uganda con una mortalidad muy alta -la mayoría de las personas en su 9º día de infección morían-.

El Marburgvirus proviene de la mordedura de un tipo de murciélago, el Rousettus aegyptiacus.

Las medidas sanitarias más inmediatas para controlar estas enfermedades son el abastecimiento de agua potable y la higiene rigurosa, principalmente de las manos.

 

CONSECUENCIAS ECONÓMICO-SOCIALES

  • Reservas de divisa bajaron
  • Mercados estancados
  • Aerolíneas y barcos bloquearon sus rutas
  • Proyectos de desarrollo económicos cancelados
  • Inflación en precios de bienes y servicios y servicios de salud
  • Disminución de la renta per cápita
  • Problemas muy graves de hambrunas
  • Alta tasa de mortalidad infantil

 

ECONOMÍA vs MEDIDAS PREVENTIVAS

La Organización Mundial de la Salud, juntamente con el Banco Mundial en el pasado mes de febrero, hicieron público que tomarían medidas económicas para el combate del nCoV19 en los países más pobres y con menos recursos.

Etiopía es el único país que mantiene sus rutas abiertas entre China y África.

Por ahora se han cancelado las conexiones entre Adis Abeba, El Cairo, Nairobi y Sudáfrica con el gigante asiático. No obstante, a pesar de que la aerolínea nacional egipcia Egyptair también suspendiera sus vuelos, el contagio del nCoV19 se dio igualmente.

No hay cifras demasiado objetivas, pero se estima que en África vivan 2 millones de ciudadanos chinos, entre profesionales y estudiantes.

 

LOS RECURSOS NATURALES DE ÁFRICA

  • Minería: yacimientos de minerales preciosos como los diamantes y metales: oro, cromo, cobalto, extracción del hierro, manganeso, cobre, uranio, bauxita. -utilizado para exportación-.
  • Energía: yacimientos de petróleo y gas natural. Recursos hidráulicos, aunque con escaso aprovechamiento propio. Ejemplo de ello es Nigeria, que exporta prácticamente todo su crudo.
  • Turismo: paisajes, legado cultural, exotismo, muchas zonas poco explotadas. Uno de los países que más vive de este recurso es Egipto.

 

PRESENCIA ESTRATÉGICA EN ÁFRICA

Bases militares francesas, italianas, japonesas, americanas y chinas se ubican en Yibuti, país del Cuerno de África que hace frontera con Eritrea al oeste, al sur con Etiopía y al este y sureste con Somalia.

Este país está estratégicamente tocando al golfo de Adén, que une el mar Rojo, Canal de Suez, mar Mediterráneo y el mar Arábigo.

Esta zona es de gran interés para todos los países, pues es donde se lleva a cabo un cuarto de las exportaciones mundiales entre los mercados europeo, africano y asiático. Aunque el interés sería más bien de índole terrorista para salvaguardar las operaciones militares, principalmente americanas, Trump, al ver como China avanzaba económicamente en este continente, no quiso quedarse atrás temiendo al país asiático cuando este también decidió instalarse en Yibuti.

La rivalidad entre Estados Unidos y China es evidente y lógica, ganando importancia en esta parte del mundo desde hace dos años por los grandes negocios cerrados entre China y África en los sectores de finanzas e infraestructuras que condicionaron un aumento del posicionamiento militar en la zona para salvaguardar los intereses económicos chinos.

Con el acuerdo para el libre comercio que entró en vigor en 2001, Estados Unidos y África triplicaron sus relaciones comerciales en productos como café, chocolate, petróleo, madera o incluso aeronaves.

La nueva estrategia americana, Prosper África, tiene como base sostener condiciones favorables de inversión en el continente.

África alcanzó valores nunca vistos en el aumento de su PIB en más de 4,6% en la última década (fuente: Banco Mundial).

Solo en Etiopía se generaron 715 millones de dólares en 2015 en la industria textil y del calzado.

Los países que tuvieron un desarrollo económico más significativo fueron Argelia, Nigeria, Zambia, y también Guinea Ecuatorial y Angola.

Lo mismo pasa con Rusia,  que también triplicó sus acciones comerciales con África entre 2005 y 2015, condicionada por la invasión de Crimea.

Por último, Europa también elaboró un proyecto, Plan de Inversión Europeo, con la finalidad de promover las inversiones en África Subsahariana, aportando aproximadamente 4.100 millones de euros con el objetivo de fomentar las políticas públicas de desarrollo sostenible con generación de empleo y apoyo a las medidas migratorias, con tal de no perjudicar siempre a los mismos países que acogen.

 

PROPAGACIÓN DEL nCoV19 EN PAÍSES SUBDESARROLLADOS

Son varios los indicadores que se verán afectados si una nueva epidemia surge en países subdesarrollados.

Después de un análisis general, focalizado en África que es el continente con mayores índices de pobreza mundiales, hay que ser conscientes de las carencias y debilidades de estos países en lo que se refiere a sus redes de infraestructuras, ausencia de recursos mínimos de subsistencia y salud, sobrepoblación, inseguridad ciudadana (terrorismo y otras conductas delictivas) o la inestabilidad religiosa.

En África el hambre preocupa más a la población que cualquier virus, aunque sin duda el continente es el blanco predilecto de las mayores epidemias como el ébola, la malaria o el cólera.

Pese a los esfuerzos de la Organización Mundial de Salud para controlar la epidemia del nuevo coronavirus y no declarar la situación de pandemia, se está asistiendo a la propagación del virus a nivel mundial. Sin embargo, por ahora en África, India o países en vías de desarrollo como Brasil o Ecuador aún tienen muy pocos casos positivos.

No obstante el Banco Mundial, en consenso con otras organizaciones internacionales, ya tienen activados protocolos de actuación y medidas de austeridad para prevenir los efectos de la nueva cepa del coronavirus en caso de que se extienda a áreas geográficas más desfavorecidas.

Se sabe que las motivaciones políticas en zonas como África, más que humanitarias son económicas por su riqueza en el subsuelo, donde se localizan todo el tipo de metales, muchos de ellos preciosos, minerales, gas y petróleo.

Esto fue lo que llevó a que las grandes potencias como Estados Unidos, China, y también Rusia, se enfrenten en la lucha por monopolizar el mercado africano.

En China, debido a la última reforma laboral que implicó la subida salarial de los sectores más desvalorizados, hubo una necesidad de que el país buscara mano de obra más barata en otros países como África, Paquistán o India.

Todo esto ocasiona que los gobiernos con relaciones comerciales y estratégicas en los países subdesarrollados, y también los organismos mundiales, por efecto cascada, estén preocupados por el avance del nCoV19 en estas zonas.

Alerta nCOV19

 

EFECTOS DEL AVANCE DEL nCOV19 EN PAÍSES VULNERABLES

Al existir tantas deficiencias en lo que se refiere a recursos de saneamiento básico, recogida de basuras, tratamiento de aguas y de residuos, medidas de anticontaminación y, también debido a fenómenos atmosféricos como pueden ser los ciclones, la mayoría de la población es más propensa a sufrir un contagio.

Por otro lado, como se refirió en este artículo, la escasez de profesionales de la sanidad, la desinformación de la población sobre las distintas enfermedades, el hecho de desconocer cuáles son los síntomas de cada patología y no saber cómo proceder en caso de estar enfermo, lleva a que la asistencia llegue a muy pocos pacientes y que apenas existan medicinas para tratarlos.

También la elevada desigualdad social que existe en países como Brasil, donde en la misma ciudad puede haber índices de pobreza de países de tercer mundo como en las famosas “favelas” de São Paulo o Rio de Janeiro, que ni disponen de agua potable y los niños conviven con ratas y cucarachas, además de que la mayoría pasa hambre, son condicionantes de riesgo para el contagio de una enfermedad vírica.

Los efectos colaterales a los que asistiremos, principalmente en África, en caso de que el nCoV19 se propague a estos países, son la celeridad en los contagios, el número elevado de muertes y la dificultad para realizar pruebas/chequeos, lo que llevará a que no se pueda distinguir entre resfriados normales, gripes u otras enfermedades respiratorias, incluyendo el nuevo coronavirus. También preocupa que mucha gente no tome medidas preventivas, debido a la falta de acceso a la información, ignorancia de la población por temas culturales y el número muy limitado de profesionales que puedan informar y prestar asistencia médica.

A pesar de que a raíz de la cepa de coronavirus SARS, en 2003, y del brote de ébola, de 2014 y 2016, que se vivió en el continente africano mejoraron los servicios de detección y tratamiento en estos países siguen estando en la lista de los países con menor capacidad de respuesta y peor eficacia de reacción ante enfermedades de cualquier tipo.

La falta de recursos para enterrar y/o incinerar los cadáveres, facilitará el contagio de los que todavía estén sanos, y eso puede derivar en tasas de mortalidad bastante descontroladas.

Con relación a la parte económica, los inversores y empresas locales buscarán otras opciones, lo que llevará al aumento de los índices de paro locales, y automáticamente de la pobreza y tasa de mortalidad, no sólo por enfermedad, sino también por hambre.

El PIB nacional en África bajaría, después de la gran subida registrada en la última década, y eso influirá en los ingresos de cada familia.

La deuda externa también se incrementaría y se vería una gran inflación en los precios que, junto con una gobernanza corrupta, favorecería el abuso de poder, los índices delictivos de cuello blanco y también la delincuencia común como hurtos, robos, etc.

Por último, la tasa de natalidad disminuiría significativamente. Aunque es cierto que estos países tienen índices de natalidad muy altos, debido a la falta de controles de natalidad.

Lo mismo pasa con los índices de mortalidad, debido a todo lo explicado anteriormente.

Sin duda, en caso de que la OMS declare el estado de pandemia, las medidas preventivas anticonceptivas y de reproducción sexual deberían ser una prioridad para evitar la sobrepoblación desnutrida que acabará pereciendo.

Es importante tener claro que en el continente africano las deficiencias de los sistemas de salud, la precariedad y escasez en instrumentos médicos pruebas de diagnóstico no permite identificar correctamente una enfermedad y distinguir entre un simple resfriado y una enfermedad respiratoria grave. Todo esto lleva a que la veracidad de los datos publicados pueda estar condicionada.